Brilla la mañana luminosa,
como música de fina
alborada,
con suavidad y perfumes de
flores,
con sabor a ternura,
con mirada de Dios que nos
habla.
Cada brote una sonrisa,
el amor incipiente que
abraza,
los sueños que se hacen
esperanza,
la luz que aprisiona
entrañas,
y la primavera que nos
atrapa.
La vida que en cada flor
se renueva,
que acaricia, que ilumina,
que entre lirios y rosas
tercas,
nos regala su fragancia
invitándonos a la fiesta
de la gracia.
Y allí Señor esperándonos
con tus delicias,
esas que en las mañanas
enamora y
al llegar las tardes nos
calman,
la que nos abraza
engendrando tu amor,
y nos reviste de la flor
que más ama.
Te pedimos florece en cada
brote del alma,
a pesar de las tristezas,
de los aires de ira,
de lo que nos pasa y nos
duele,
aparece en nuestras
pequeñeces,
para ser flor perenne que
estremece.
Quédate en nosotros, en
cada rincón,
entre los narcisos y las
azucenas blancas,
para guiar la pobreza de
nuestras vidas,
y en ese amor que llama y
que nace,
Señor, abraza y cura las
almas.
Ana María Capalbo
Felicitaciones Ana Maria.! Solo se me ocurre: "Estallo la Primavera".............!!!
ResponderEliminarETEL