Quiero presentarles los blogs de dos de nuestras queridas poetas;
Uno es el de Karla Wagener, y es bilingue.
http://radioteatrobilingue.blogspot.com.ar/
El otro es el de Rosa en camino, de Córdoba, y se llama Quédate con nosotros.
http://www.rosadehoy.blogspot.com.ar/
domingo, 29 de septiembre de 2013
sábado, 28 de septiembre de 2013
¡Dios soñó!
Algo que te roza.
Rosa que te ama.
Tumbarte en tambores
De amor y felicidad.
Algo que te mueve.
Tranquilizar y siembre,
Algo que te toca siempre...
Y te roza.
Una planta que te come
Para comer tu amor.
Una rosa sola
Que toca tu memoria,
Y no te deja, ni pensar...
Rosa en la tumba de
Tambores de la memoria
para tocarte sin cesar
Y envolverte en laureles,
Para moverte en tus sueños,
Que se juntan con los nuestros,
Y el Sueño se hace
REALIDAD!
Karla Wagener
jueves, 26 de septiembre de 2013
Dios Padre y Creador
Allá, en los orígenes,
¡en la génesis del tiempo,
cuando Tú creabas!
Hombre y mujer creaste,
a tu imagen y a tu semejanza.
¿Cuál será esa imagen de la cual
nos hablas, si aun en la Biblia,
Tú mismo nos prohíbes
jamás usarlas?
¿Será acaso en la imagen
de tu muy amado Hijo Jesús,
en quien pensabas, y de la cual
san Pablo, en sus cartas habla?
¿Y cuál será esa imagen
que al Señor Jesús,
de tal forma, tanto le agrada?
En el Evangelio, la única vez
que Jesús nos pide expresamente
que lo imitemos, exclama:
“Imítenme
a Mi, que soy manso
y humilde de corazón”.
¡Esto pareciera ser algo,
muy significativo para el Señor!
Y a la sazón debiéramos trabajar
en esta imagen y semejanza.
¡Procurando a ultranza,
imitar a tu amado Hijo Jesús,
en sus gestos y actitudes!
Renovando nuestra fe, el amor,
y la esperanza.
Hno. Santiago E. Kloster, ssp
Puños cerrados
Puño cerrado, no mano abierta.
Palma que pega contra el rival.
Armas producen heridas cruentas.
Flota en el aire aroma letal.
Bombas, palabras, gestos, agravios,
entre personas o entre naciones.
De los fusiles o de los labios
surgen, fecundas, las agresiones.
En el día a día de la calle
o en una estrategia militar
un hermano a su prójimo sale,
arrebatado, la paz a robar.
Imagino en este sinsentido
lo que Dios se debe preguntar:
_ Vida les dio mi aliento divino.
Mas . . el
valor de ella . . ¿dónde está?
Si acalláramos, por fin, las balas
para hundirnos en nuestro interior
sabríamos que
la que nos llama
es una sola ley: el Amor.
En guerra el rebaño no está atento
y no escucha la voz del Pastor.
Sólo en la Paz
oiremos: “¡Hijos!”
y podremos responder:”¡Señor!”
Teresita De Antueno
BÁJATE DE LA CRUZ
Con cada gesto de amor, Señor, me atrapas
y eres Tú, suspendido del madero
quién me llama a seguirte, buen cordero,
porque Tu Vida por mi, no diste en vano.,
Bájate de la Cruz, que no es tu sino
morir crucificado por nosotros,
ingratos, merecemos hoy, tan poco
y sin embargo nos donas Tu Martirio.
Mira los ojos tristes de Tu Madre
y solo por Ella atiende a mi deseo.
Bájate de la Cruz porque ahora entiendo
cómo es de grande Tu Amor. Cuánto te importo.
Sarah Petrone
miércoles, 25 de septiembre de 2013
REVERIE ANGELICAL
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L
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a
misa ha terminado, podemos ir en paz. “Demos gracias a Dios”, contestamos todos
al unísono. Así, los feligreses nos disponemos lentamente, a abandonar la Basílica de San José de
Flores, mientras el órgano de tubos nos regala sus últimos compases. El
sacristán comienza a apagar las velas. Algunas señoras guardan los objetos
sagrados del altar cuidadosamente; y, poco a poco, las luces comienzan a
declinar. En la sacristía, el sacerdote ya despojado de sus vestiduras. las
guarda en un ropero antiguo junto a la de los acólitos.
Todo
va oscureciéndose, hasta que la gran iglesia con un estruendoso sonido anuncia
que sus puertas han quedado cerradas, tan sólo por unas horas. Quedan
aparentemente la fragancia de las flores, el humo de las velas y, por fin, el
agua bendita ha dejado de ser agitada para tomar la apariencia de un espejo en
el que cada uno podría ver sus fragilidades. El sacristán finalmente abandona
el recinto haciendo una leve genuflexión ante el crucifijo. Mentalmente repasa
el cierre absoluto de cada uno de los posibles accesos... El día ha concluido.
Cuando
ya todo parece aquietado por las penumbras, sucede lo contrario. Comienzan a
descender ángeles. Unos bajan de los altares, otros de las columnas, de la cúpula,
de los grandes ventanales y de un sinnúmero de los frescos pintados
deliciosamente sobre las paredes. Son tantas y múltiples sus formas que la
iglesia entera cobra el aspecto de estar llena de gente. Como si estuviéramos
en plena misa de las 19.
Recorren
todo los lugares y en cada uno van recogiendo entre sus manos la oración de
cada persona que ingresó durante la jornada. Algunos se apropian de ellas de
tal forma que dan la sensación de que son cartas que aprietan contra su pecho.
Conversan entre ellos, convocan urgentemente a los ángeles custodios y sellan
la plegaria con un conjuro divino, otorgado por Dios.
Esa
energía, como un destello veloz, atraviesa las macizas paredes venciendo todo
tipo de obstáculos y viaja hasta el altar puesto en mi hogar, donde yo
devotamente continúo mi oración... ¡Y soy tocado! Mi amado ángel custodio me
hace saber que mi voz ha sido escuchada... Entonces, me dirijo al lecho y queda
tan sólo una pequeña vela encendida. Basta su llama para iluminar de manera
misteriosa el bellísimo icono de la Virgen María.
Esa
luz, aunque yo esté dormido, queda vigilante y expectante con mi latente fe. Es
ahí cuando la imagen se convierte en un imán al que su divino hijo se siente
atraído. En ese magnífico momento el altar está vibrando y esa candela
flameante se convierte nuevamente en testigo del milagro de Dios. Todo comienza
a ser penetrado y bendecido, mas el ángel que se encuentra en la Basílica , antes del alba
recibe exultante la confirmación de que para Dios todo es posible.
Otros
seres alados han tocado las flores obsequiadas en los diferentes altares y, en
sus pétalos, leen la intención de quién las dejó. Ellas expiden el aroma de la
gratitud; utilizan este bálsamo para embadurnar los cimientos y la construcción
entera, fortaleciendo así más y más el lugar.
Por
eso, cuando entro a una iglesia, tengo la certeza de que estoy pisando suelo
sagrado. Soy movido a rezar y sé que todo por lo que allí pida, volverá en
bien... o sea, la voluntad de Dios en mí.
Anoche, adorné nuevamente mi altar...
pues sé muy bien que cuando esté atravesando lo más profundo del sueño, otra
vez sucederá, el milagro recién narrado.
Jorge Santisteban
Del libro: LA CUNA DEL ÀNGEL
Réquiem para un martillo
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Sobrevive la fuerza de su mano
sobre tu mango añoso de madera,
ahondaste la punta de ese clavo,
unido a su mirada tan certera.
Martillo que mi padre utilizaba
en su afanosa tarea de artesano,
mientras con melodiosa voz cantaba
las estrofas dolientes de ese tango.
Hoy te veo en la caja de madera
Silencioso, del ruido abandonado,
solitario en la paciente espera.
Así mi padre duerme hasta el momento,
en que la voz de Dios despierte a todos
los que partieron para un nuevo nacimiento..
Elsa Tébere
7 NEGROS Y 7 BLANCOS
Negro y blanco los colores, que va tiñendo en el mundo,
los sentimientos profundos, que mueven nuestras pasiones,
un choque de sensaciones, nuestras almas acaricia,
negra envidia y avaricia, negra lujuria y soberbia,
se enfrentan en cruenta guerra, con la ciencia y fortaleza;
disfrazada la pereza, junto a
la ira y la gula,
por las sendas más oscuras, quieren llevar nuestras vidas,
más la blanca paz del día, nuestra conciencia ilumina,
y el blanco amor ya domina, sobre el negro odio y violencia,
con piedad e inteligencia, teniendo temor de Dios;
desde él llega la voz, dándonos un buen consejo,
y al irnos haciendo viejos, la blanca sabiduría,
acaba con la porfía, nuestras vidas nos alegra,
pues en la noche más negra, brilla una luz de esperanza,
y esa claridad alcanza, para blanquear corazones,
llenando con blancos dones, de fe, amor y esperanza.
Ruben Esteves
PRIMAVERA
Yo te pregunto Señor, ¿Cómo ve la primavera,
el que vive encarcelado, viendo el sol solo allá afuera,
mientras brotan de sus ojos, lágrimas que lo condenan?
¿Y el enfermo que postrado, se encuentra en una litera,
queriendo recuperarse, de la enfermedad perversa?,
llega el sol por su ventana, pero las flores, no aprecia.
¿Y en aquel país lejano, que se encuentra en triste guerra?,
se hoye el ruido de cañones, de metrallas y escopetas,
mas el trinar de las aves, no se escucha en primavera.
También está el indigente, sin un pan sobre su mesa,
él no puede celebrar, ni ir a pasear aunque sea,
para él, siempre es invierno, pues castiga la miseria.
Está quien no tiene fe, que lo guie por la senda,
o el que vive solitario, sin un amigo siquiera,
para ellos siempre es igual, todas sus noches son negras.
Aunque no entiendo el porqué, de tan grandes diferencias,
solo debo agradecerte, el amor que me rodea,
tengo el sol que me ilumina, y un cielo lleno de estrellas.
Gozo las flores, las aves, la naturaleza plena,
como y bebo diariamente, desayuno, almuerzo y cena,
y descanso en paz y calma, porque tu amor me sustenta.
De fe, amor y esperanza, toda mi vida está llena,
acepto tu voluntad, aunque muchas veces duela,
¡Gracias te doy por la vida, y esta nueva primavera!
Ruben Esteves
EL CANTO DEL ARBOL
"Pecado es una palabra de origen griego que significa algo así
como división. Había en Grecia un camino
principal por donde pasaba el pueblo, como transitando todos por una gran ruta,
y de vez en cuando aparecían unas salidas laterales. Cuando un griego dejaba de caminar con todos
y se metía por ese camino individual, se iba al pecado. Dejaba de tener común-unión, dejaba de
caminar con los otros".
Del libro “La Mesa Vacía” de: Padre Luis Farinello
(Dedic. a Padre Antonio)
Soy un árbol con muchas frutas,
Son simples, pero muy astutas.
Todas cantan con voz alta, o con pudor,
El amor de Dios y su Gloria de esplendor;
Liberación del pecado,
Un camino único, un nuevo estado;
La senda, la forma y la vía,
Es única para todos, y también es mía.
El amor y la Fe son las respuestas.
¿Pero estamos dispuestos?
Una fruta nueva,
Que espero que te mueva.
Y hasta que todo se realice, así
como dice la promesa…
¡Canten hermanos, reciten, y comparten la Mesa!
Karla Wagener
Los Dones
¿De que sirve Señor
si lo pienso y no lo digo?
¿De que sirve Señor
si lo digo y no lo hago?
Tú me has dado dones
para mostrarlos y darlos
Necesito
la fuerza de Tu Espíritu
para sacarlos y derramarlos
Tu Luz
para saber cómo
y cuando hacerlo
La voluntad
para que mi obrar
sea coherente con mi
pensar
Señor, ayúdame
a mantener la lámpara
encendida
para mostrar Tu camino
Rosa Inés Vanni de Romero
PRIMAVERA DE AMOR
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Brilla la mañana luminosa,
como música de fina
alborada,
con suavidad y perfumes de
flores,
con sabor a ternura,
con mirada de Dios que nos
habla.
Cada brote una sonrisa,
el amor incipiente que
abraza,
los sueños que se hacen
esperanza,
la luz que aprisiona
entrañas,
y la primavera que nos
atrapa.
La vida que en cada flor
se renueva,
que acaricia, que ilumina,
que entre lirios y rosas
tercas,
nos regala su fragancia
invitándonos a la fiesta
de la gracia.
Y allí Señor esperándonos
con tus delicias,
esas que en las mañanas
enamora y
al llegar las tardes nos
calman,
la que nos abraza
engendrando tu amor,
y nos reviste de la flor
que más ama.
Te pedimos florece en cada
brote del alma,
a pesar de las tristezas,
de los aires de ira,
de lo que nos pasa y nos
duele,
aparece en nuestras
pequeñeces,
para ser flor perenne que
estremece.
Quédate en nosotros, en
cada rincón,
entre los narcisos y las
azucenas blancas,
para guiar la pobreza de
nuestras vidas,
y en ese amor que llama y
que nace,
Señor, abraza y cura las
almas.
Ana María Capalbo
EL GRITO DE LA PAZ
ante
tanta guerra, tanto dolor
producto
de falta de entendimiento
de la indiferencia, del desamor.
La
violencia acarrea más violencia
el odio,
el resentimiento
el no te
metas, nos han superado
a nadie
le importa el que está a su lado.
La
grandeza de un país
se
muestra en su humildad
en la
amplitud de corazón
no, en
el devenir de la sinrazón.
No sólo
en Siria, Medio Oriente
los cadáveres
hablan por doquier.
También
en todo país
donde no
se disiente
no se
admite discrepar
ni se
quiere ver,
ni se
quiere dialogar.
Elevemos
este grito por la paz
sin
diferencia de razas, religiones
rogando
por un sinnúmero de perdones;
es el
grito de la humanidad
a fin de
ser juzgados
por Dios
y la Historia
con
total serenidad!
Etelvina Giménez
POEMAS PARA DOS ROSAS
PARA LA ROJA
Surgida
de la tierra, flor y llama,
en
el tallo graciosa se perfila.
Efímera ilusión, sueño de un día.
Suavidad de unos pétalos de grana
que
en el aire recortan su armonía.
Vibración de color, ala de sangre,
suspiro apasionado de la tarde
en
su íntima y fugaz melancolía.
Corazón que se entrega intacto, puro,
al amoroso abrazo de los vientos
que ya conocen su dolor desnudo.
Lacre
que sella el dulce encantamiento
de unas alas que invaden sin murmullo
su rojiza corola de silencio.
...........
PARA LA BLANCA
Quieta paloma en cáliz prisionera,
virginal y sublime, rosa blanca.
Aliento de la tímida plegaria
que tributa a los cielos la belleza.
Majestuosa y serena maravilla,
sutil ensoñación de la ternura.
Y se yergue felíz, copo de luna
que se goza brillando entre la espina.
Es la mano de un ángel que hace señas
cuando en los brazos de la brisa tiembla
acunando su grácil atavío.
Y la noche la erige en soberana...
Por eso la sorprende la mañana
con su freágil corona de rocío.
Isabel Puncel de Dumery
Algunas fotos del Café de septiembre de 2013
El sábado 21 de septiembre, pese a la lluvia, nos reunimos en el Café del P. Hernán, la mejor manera de comenzar la primavera. Y qué linda tarde pasamos, con música, presentacióne tres!!! libros, teatro y poesía. Comparto algunas de las fotos...
Tarjetitas de las Melli... Feliz primavera!!!
Teresita
Hno. Santiago
Karla...como el Zorro
Karla (zorro) y Olga como El Principito! Y Mercedes presentando
El Principito y el Zorro
Yo mostrando el termo del Papa
Susana y Mercedes
Susana y unos bellos tangos!
Ana María
Mariel
Claudia
Rosa
Silvia
Rubén
Los libros que presentó Jorge
Jorge
Jorge y Pruselín
La hermosa tarjeta que hizo Jorge con un poema para Hernán
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