La herida ha comenzado a cicatrizar
hoy caí en la cuenta Hernán,
que aunque el dolor es profundo
ha dejado de sangrar.
Las lágrimas que nunca pude derramar
lentamente van bañando mi cara
brindándome serenidad,
me consuela pensar que, para siempre
estás con el Amado, en la eternidad.
Doy gracias al Dios Bueno
por nuestra hermosa y sólida amistad!!!
Etelvina Giménez