Estamos iniciando una nueva etapa en este café, ahora bautizado El Café del Padre Hernán, es hermoso verlos a todos aquí, y sé que él nos está acompañando también.
Pasaron muchos años desde que Hernán dio inicio a este Café de poetas, entonces llamado Café del Abrazo Literario, muchos de ustedes están desde el comienzo, yo entré dos años después. Durante años lo acompañó Elsa, colaborando con Hernán en la organización del café, como lo hice yo cuando ella por motivos personales decidió alejarse. Los dos últimos años lo hicimos juntos Hernán y yo, y nos divertimos mucho. Nunca pensé que hoy iba a estar acá sola parada frente a ustedes.
Hernán no quería que todo lo que había hecho con tanto amor se perdiera, él quería esto, que siguiéramos juntos, y hoy le mostramos que pese a estar dolidos por su partida, vamos a seguir haciendo florecer las semillas que sembró. No les voy a negar que fue difícil armar todo sin tenerlo físicamente a mi lado, pero saber que estoy haciendo lo que él me pidió y lo que yo quiero hacer, contar con el apoyo de los hermanos paulinos, y que estén ustedes acompañándome en esto, que es de todos nosotros, me da fuerzas para hacerlo, porque de más está decir que en realidad este Café siempre lo hicimos entre todos.
Si bien todos los Cafés de ahora en más serán dedicados a Hernán, éste primero lo es de manera especial. También dedicamos este Café a Ketty, la mamá de Hernán, que partió a la casa del Padre hace muy poquito, el 21 de marzo, y que hoy debe estar junto a su hijo mirándonos desde allá arriba.
Aunque es difícil, les pido a todos que lo recordemos con alegría, la alegría de haberlo conocido, de saberlo junto al Padre, y con una inmensa gratitud por haber sembrado amor en todos los lugares por los que pasó, por habernos unido y por acompañarnos y cuidarnos desde el cielo. Gracias Hernán. Gracias todos.
Lis
Admiro tu enteresa Lis, para estar alli tan es-
ResponderEliminartoica. No estabas sola los que te queremos, esta-
bamos apuntalandote con oracion y no dudo que Her
nan y su madre felices te daban el beneplacito y
felices sonreian.!
Gracias Lis y gracias a mi querida flia.Paulina
por haber hecho realidad, este ultimo deseo de
Hernan...!
ETEL